Carlos A. Guerrero

Barras y socios presentes en la primera asamblea luego del descenso agredieron con sillas, botellas y hasta zapatillas al presidente y a su comisión directiva. Piden la renuncia de todos los dirigentes.

El presidente de Independiente, Javier Cantero, fue atacado a sillazos en el gimnasio Radrizzani de la sede del club, donde debía desarrollarse esta tarde la Asamblea de Representantes de Socios.

Un grupo de socios, enfurecidos por el descenso a la Primera B Nacional, bajó de las galerías del recinto e invadió el piso donde se ubicaban los dirigentes para atacar a la Comisión Directiva, que debió abandonar el lugar en un clima de extrema tensión.

El presidente del club intentó iniciar el acto en un clima hostil. No fue muy inteligente de su parte anunciar un aumento en la cuota social como primera medida. El gimnasio estaba lleno de hinchas furiosos que pedían su renuncia con una ola de insultos. Pocos minutos después, se vivió una repudiable situación dramática.

Un grupo de barras decididos a agredir ingresó al salón y comenzaron a lanzar sillas y otros artefactos a Cantero y los demás dirigentes. Inmediatamente, otro grupo de violentos bajó las cámaras que capturaban el momento de descontrol y cortó la señal televisiva.

“Cantero provocó todo”

Noray Nakis, dirigente opositor de Independiente, afirmó que «Cantero provocó todo».

«Se empezó la asamblea una hora y media tarde. El presidente entró y golpeó la mesa con su carpeta. Acá no hay barras, Cantero provocó todo por cómo tiró la carpeta en la mesa. Ese golpe lo tomaron mal el hincha y los socios», justificó el directivo.

Luego Nakis advirtió: «lo único que debe hacer Cantero es renunciar. No había barras, eran socios de Independiente los que ingresaron».