Carlos A. Guerrero

La sede del Club Atlético Independiente fue blanco de un lamentable hecho perpetrado por vándalos. Desconocidos entraron al Club, ubicado en Rivadavia e Italia, y provocaron diversos daños.

Los vándalos robaron bebidas que habían sobrado de los bailes de egresados, rompieron botellas, paredes, cortaron cables y destrozaron el techo de uno de los baños del polideportivo al subirse arriba del mismo.