Carlos A. Guerrero

Argentina-Venezuela Copa América

En un partido electrizante, la Argentina le ganó 4-1 a Venezuela con goles de Higuaín (2), Messi y Lamela. El equipo mostró todo su potencial ofensivo y contó con un gran trabajo de Chiquito Romero, quien le atajó un penal a Seijas en el primer tiempo. Ya se metió entre los cuatro mejores del torneo y el martes enfrentará al local Estados Unidos por un lugar en la final.

Higuaín fue puntual. En su primera intervención definió con mucha clase y puso el 1-0. Y finalmente fue un regalo de Figuera con un pase corto hacia atrás el que generó el 2-0, con otra buena definición de Higuaín, gambeteando al arquero y tocando al gol.

Todo asomaba tranquilo, pero Argentina volvió a sufrir en defensa. Esta vez no tuvo la solvencia que venía mostrando en la primera fase. Mascherano no controló en el medio y los centrales lucían desacoplados. Así Rondón empezó a generar peligro y Chiquito Romero se fue convirtiendo en figura.

En medio de rebotes y marcas sin ajustar, llegó el penal que desperdició Seijas de manera increíble y que atajó Romero.

En el segundo tiempo, Argentina otra vez salió a marcar presencia y Messi encontró el esperado gol para llegar al récord de Batistuta como máximo anotador en la historia de la Selección. La manejó bien Gaitán que lo habilitó a Messi en el momento justo. La Pulga entró a la carrera y tocó de caño para el 3-0.

60 segundos pasaron entre el descuento de Venezuela con el buen cabezazo de pique de Rondón y el 4-1 de Lamela, que recién había ingresado por Gaitán y definió exigido contra el palo.

Lo ganó muy bien Argentina. Con individualidades que fueron alternando picos altos de nivel: por momentos Banega, ráfagas de Messi, las definiciones de Higuaín y las manos de Romero. Quedarán para revisar las dudas en defensa, que por ahora quedan maquilladas con todo el potencial ofensivo.