Carlos A. Guerrero

Alegría en Lobería. Es lo que se vive en las calles de la ciudad con el desarrollo de una nueva edición de los Carnavales 2018, de los que el público participa masivamente. Más de 500 loberenses se encuentran participando en comparsas, carrozas y disfraces, en esta fiesta que convoca a miles.

El sábado por la noche se iniciaron los Carnavales, con el corte de cinta inaugural por parte de la Directora de Cultura Gabriela Reggiani y representantes de comparsas locales, que en esta ocasión son cuatro.

Un impresionante despliegue de color brindaron desde la primera noche las comparsas Arlequines y A Todo Ritmo, además de Todos Juntos (Tamangueyú) que retornó a los Carnavales y se lució nuevamente con una gran carroza, y Papelito haciendo su gran debut.

Cada una de las comparsas realizó un gran despliegue en las 3 cuadras de recorrido (avenida San Martín, avenida Mitre y calle Francia del 0 al 100), mostrando ritmo, vestimenta y coreografías preparadas con dedicación a lo largo del año.

Se supo que este año no habrá elección de la Reina de los Carnavales por falta de postulantes. Otro de los puntos de los Carnavales que luce diezmado es la presentación de carrozas y disfraces, resultando menos que en ediciones anteriores, no obstante, los de esta edición han mostrado inventiva, como así también el gran Rey Momo elaborado por la Asociación Amigos de los Niños con la buena calidad a la que nos han acostumbrado.

La Comisión de Medio Ambiente implementa este año la iniciativa de sortear una bicicleta por noche, al entregar un número a cada persona que entregue 10 tarros de espuma vacíos, propuesta que logra que luego de cada jornada la zona principal quede prácticamente limpia. En la primera noche se juntaron 3000 tarros, mientras que fueron 5000 en la segunda.

Las actividades se cerraron en las dos primeras jornadas con las presentaciones de los grupos Sensación Tripical y Los Franciscos, que hicieron bailar al público. La segunda noche fue distinguida con la presencia de la comparsa Arlequín, de Mechongué, mostrando un excelente nivel de vestuario, ritmo y coreografía, como en los años anteriores en los que ha estado presente.