Carlos A. Guerrero

Werner-Ford-Falcon-alambrado

Con 19 vueltas cumplidas en la final del Turismo Carretera en el Gran Premio de Alta Gracia, Mariano Werner en una de las curvas no pudo frenar a tiempo su unidad, que se disparó hacia la tierra arada, golpeó contra las gomas de contención, superó un pequeño talud y quedó prácticamente apoyado sobre el alambrado perimetral del circuito a centímetros del público. afortunadamente, al igual que los espectadores, el piloto no sufrió consecuencias físicas graves.

El Ford del paranaense se quedó sin frenos antes de la entrada de una curva a la derecha. Werner no pudo controlar el auto, que siguió derecho, atravesó la tierra arada, pegó contra las gomas de protección y sólo se detuvo cuando pegó contra el tejido.

Del otro lado, el público escapó como pudo. Sólo hubo un herido: Rodolfo Escalante, de 43 años, quien sufrió un golpe en la espalda cuando uno de los postes que sostenían el alambre dio en su cuerpo. Según los organizadores de la carrera, está fuera de peligro.

El accidente fue impresionante por la alta velocidad del auto al impactar contra las gomas de contención y en la transmisión televisiva se mostró la angustia en los boxes del piloto involucrado. Pero Werner salió por sus propios medios del vehículo, asistido por el cuerpo médico de la categoría. El piloto fue aplaudido por un público que estuvo a poco de ser embestido por el Ford número 2.

«Por suerte no hay heridos en el público, yo estoy bien. La salida fue muy veloz y hasta que lo pude frenar llegamos hasta ahí», dijo Werner.